con pastillas para no soñar

PeNsAnDo eN pEnSaR QuE PeNsAr...cOn lA MeNtE dE aQuI PaRa aLLá.


Sentarse en el metro y observar..
-¡No seas descarada!

Bah...

Me gusta mirar, observar e imaginar las vidas de las personas que están en el metro.Muchas vidas pasan diariamente por esos vagones poco cuidados.Vidas con historias, con años vividos , con secretos, con tormetos, con alegrías y confusiones.
A veces puedes leer en los ojos de la gente, dicen que los ojos es el espejo del alma, da igual que sean azules, verdes, marrones , negros, violetas o amarillos, con gafas o sin ellas...

Hay ojos que muestran soledad y cuando te miran, sientes esa soledad hasta lo más dentro de ti. Otros, sin embargo, muestran amor, pero esos ojos suelen ir acompañados de otro par a su lado, y pocas veces te miran, estan demasiado ocupados comiendose mutuamente, pero cuando lo hacen,una sonrisa curva tus labios...

Otros albergan odio "hay miradas que matan"...

Pero sin embargo,hay un tipo de ojos que hace que se me pongan los pelos de punta, que no se descifrar, que no puedo ver más allá y me hace preguntarme aún mas que esconden y guardan tan adentro, en un rincón infranqueable...esos son los ojos vacios, vacios de emociones...

Y todavía la gente me pregunta por qué me quedo mirando ensimismada a la gente...Aquí tienen la respuesta, algo liada, con toques de delirio por el calor madrileño, y sin mucho sentido para las personas poco curiosas o que simplemente no se preguntan que hay mas allá de una mirada o de una caja mas o menos maquillada que envuelve mil misterios.


Y Ortigueira llega y con ello se aleja el calor asfaltado.